Efemérides

¿Cuál es la conexión entre la tauromaquia, Rodolfo Valentino, Rita Hayworth, Juan Ramón
Vidal y Riachuelo en Corrientes?


La respuesta es Vicente Blasco Ibáñez, el escritor valenciano mundialmente célebre por
sus novelas “Los cuatro jinetes del Apocalipsis” y, principalmente, por “Sangre y arena”,
que tuvieron versiones cinematográficas legendarias. Nacido el 28 de enero de 1867,
Blasco Ibáñez era ya un escritor reconocido cuando se embarcó en 1909 con rumbo a la
Argentina para dictar una serie de conferencias. Regresó a España con las experiencias para
escribir un libro, “Argentina y sus grandezas” y una idea: fundar una colonia agrícola en
Corrientes con campesinos españoles. Desde su periódico El Pueblo convocó a sus
compatriotas para formar parte de la empresa, que tenía mucho de gesta romántica. El lugar
elegido era el Paraje Lagraña, en la desembocadura del Riachuelo, cinco mil hectáreas que
Blasco Ibáñez pensaba explotar importando las técnicas europeas más modernas de cultivo
e irrigación.


El 30 de octubre de 1910 le envió al gobernador Vidal una nota manuscrita (dando inicio
formal a los trámites para el establecimiento de la primera colonia española en nuestra
provincia), para “implantar en la provincia de Corrientes los adelantos agrícolas de otros
países y mejorar las condiciones productivas del suelo… para engrandecer y mejorar las
condiciones naturales de este suelo privilegiado”. El mismo año se expropió el terreno, en
marzo del año siguiente arribaban al puerto de Corrientes los primeros colonos y, en abril,
Blasco Ibáñez tomaba posesión del mismo
El 20 de abril se fundó Nueva Valencia.


Para su construcción llegaron mareas de obreros españoles, austríacos, portugueses. Se
instaló una arrocera y se construyó un muelle para embarcar la producción, se proyectó un
sistema de irrigación, una planta industrial de envasado, y una vía férrea.
El sueño duró poco más de tres años.

Problemas financieros, una inundación y pérdida del apoyo oficial hicieron que Nueva
Valencia quedara abandonado como emprendimiento agrícola. Blasco Ibáñez embarcó con
rumbo a España en 1914, justo cuando estallaba la guerra. Arruinado por pérdida de la
fortuna puesta en la colonia, en una Europa que comenzaba una sangría de cuatro años por

la primera guerra en ser denominada “Gran”, Blasco Ibáñez visitó las trincheras y recogió
sus experiencias en una “Historia de la guerra europea” cuyas ventas le hicieron volver a
recuperar lo dilapidado. El éxito de “Los cuatro jinetes del Apocalipsis”, que comenzó a
escribir en el vapor de regreso de la Argentina, le devolvió definitivamente la fortuna, y fue
su primera obra en ser llevada al cine, protagonizada por Rodolfo Valentino. Luego pasó lo
mismo con “Sangre y arena”, con una versión protagonizada por Rita Hayworth.


Aventurero, poeta, político, pionero, millonario, arruinado y millonario de nuevo, falleció
en Francia el 28 de enero de 1928. “Quien viaja en tren desde Concordia a Corrientes da un
salto como si se pasase de Europa a América. Lo que deja a su espalda parece el Viejo
Mundo; lo que tiene enfrente es la verdadera América, la América tropical tantas veces
admirada en los libros”, supo escribir sobre esta Corrientes que signó su vida.